Los electrodomésticos, como aparatos y máquinas que son, pueden padecer diferentes problemas de funcionamiento a lo largo de su vida útil, los cuales en algunos casos se limitan a mermar su rendimiento pero que en la mayoría de las ocasiones impiden su funcionamiento por completo. Las causas de que un electrodoméstico deje de funcionar pueden ser muy variadas, desde una falta de mantenimiento hasta una mala instalación pasando por la posibilidad de que simplemente se deba a un uso continuado del mismo o el paso del tiempo.